jueves, 31 de mayo de 2012

Persona e ideologías


Persona e ideologías

SERGIO TAPIA TAPIA

Director Jurídico de UnoAmérica






Las ideologías son fenómenos racionalistas aparecidos a partir del siglo diecisiete. La primera ideología fue el absolutismo monárquico, concepción política originada por el error doctrinal del derecho divino de los reyes, producido por las revoluciones religiosas de esa época.

La monarquía absolutista hizo tabla rasa de la igualdad esencial de los hombres, pervirtió el sentido virtuoso y de servicio al bien común por parte de quienes ejercen funciones públicas. Justificó la tiranía de los reyes y el desenfreno de las oligarquías mercantilistas.

La reacción ideológica fue el liberalismo, que concibe desacertadamente al ser humano, reduciéndolo a individuo, y consecuentemente disuelve a la familia que es célula básica de la sociedad, así como deslegitimó la organización social de la economía corporativa. El liberalismo es fuente de continuas crisis, debido a su soberbia deshumanizadora de toda auténtica promoción personal y social, y por su distanciamiento de toda política y economía concebidas virtuosamente.

Por una ulterior reacción pendular, se inaugura la era de los socialismos. Categoría ideológica que comparten los marxistas conjuntamente con los nazis. Ambos modelos socialistas, uno internacionalista y el otro nacionalista, adolecen de maldad intrínseca, debido a la deshumanización del rol del Estado, concretizado en el gulag soviético, la isla-cárcel cubana y la vileza del campo de concentración.

La seriedad de un proyecto político, reside en lo acertado de su concepción acerca de la persona humana, así como en aplicar conocimiento científico que es el antídoto contra toda perversión ideológica.

Publicado en el diario “La Razón”, Lima, jueves 31 de mayo de 2012, pág. 6

jueves, 24 de mayo de 2012

El alboroto Garatea


El alboroto Garatea

SERGIO TAPIA TAPIA

Director Jurídico de UnoAmérica







            Librepensadores y socialistas, protestan porque a un religioso católico le han suspendido el ejercicio sacerdotal en Lima.

Protestan porque el padre Garatea no puede administrar sacramentos (confesar, dar de comulgar), celebrar misas y predicar al público. Lo extraño es que los que protestan nunca van a misa, no se confiesan ni con Garatea. Porque son ateos declarados ó públicamente han abjurado del culto católico ó son críticos permanentes de los curas. Hay aquí mucha ideología y poca sinceridad.

Esta desleal campaña publicitaria, es urdida por un pequeño sector burgués irreligioso, aliado con un puñado de ateos socialistas, que se han constituido en pescadores de un río revuelto por ellos mismos, con sus repetidas falacias contra nuestro Arzobispo Cipriani y por sus altas dosis de anticristianismo.

Sus contradicciones los desdicen y dejan ver lo que tratan de ocultar. Ellos no defienden el ejercicio sacerdotal. Hacen apología de quien siendo accidentalmente sacerdote, les une ser conmilitones de cuanta campaña secularista y pro-socialista han promovido.

El padre Garatea es coautor del Informe de la mal llamada “Comisión de la Verdad”, que hizo de “toda nuestra justicia como un trapo sucio” (expresión del profeta Isaías), para enlodar a nuestras Fuerzas Armadas.

Garatea abogó por la unión civil de los homosexuales, tema reiteradamente rechazado por el Vaticano desde hace varios años. Garatea alienta el matrimonio de sacerdotes diocesanos, lo que atenta contra el celibato sacerdotal que no está en discusión en el catolicismo. Por lo que Garatea confronta la ley de la Iglesia sobre el sacramento del matrimonio.

La perfidia anticristiana, aparentando un compromiso con los pobres, suscitó la desviación revolucionaria del Evangelio ó Teología de la Liberación; de la que el padre Garatea no habría sido ajeno.

La Iglesia Católica como sociedad de hombres; exhibe imperfecciones. Pero, goza de la garantía de Dios, que la eleva y la perfecciona. La Iglesia es, por obra de Dios, depositaria de la Verdad y de la auténtica doctrina moral, contenidas en la síntesis que es el Catecismo.

La Iglesia, sociedad de hombres, es organización jurídica. Su ley es el Código Canónico, que regula los derechos y obligaciones de los fieles y su relación con las autoridades eclesiales. Establece a los sacerdotes como colaboradores de su obispo y regula la disciplina del clero, así como la administración de los sacramentos.

El obispo debe conservar y transmitir, tal cual, la Verdad y la doctrina moral de las que la Iglesia es depositaria. Para ello cuenta para ello con la colaboración de sus sacerdotes. Es inconcebible que un sacerdote juegue a la libre frente a su obispo.

Peor, aún, es que un sacerdote se enfrente públicamente a su obispo, convoque a sus enemistades personales para que lo difamen y aliente a los anticristianos que maltratan a la Iglesia mofándose de sus principios.

Garatea ha perdido las licencias sacerdotales, porque gravemente niega y reniega de los dos fundamentos de la actual renovación de la Iglesia, el Catecismo y el Código Canónico.

Publicado en el diario “La Razón”, Lima, jueves 24 de mayo de 2012, pág. 6

jueves, 17 de mayo de 2012

Gobernar ¿para qué?


Gobernar ¿para qué?

SERGIO TAPIA TAPIA

Director Jurídico de UnoAmérica






            Decepciona la ausencia de logros en tres trimestres de gobierno del presidente Ollanta Humala, y se observa con pesimismo su porvenir.

Humala deambula solitario. Pierde partidarios y carece de cuadros para gobernar. Sus infortunios políticos ponen en riesgo el consenso y aceptación ciudadanas, condiciones indispensables para gobernar en paz.

El grupo parlamentario mayoritario sería de Ollanta, pero es una gavilla de filo-marxistas. Humala, ganó el ballotage modificando su propuesta política. Al parecer lo hizo con sinceridad, porque cumple a pesar de los pesados costos, pero es fuente de fricciones con sus parlamentarios.

La legitimidad de origen presidencial es dada por un procedimiento electoral imperfecto que, insertado en una democracia vulnerable a la manipulación, origina un sistema que otorga decisión política a ciudadanos masificados que adolecen de cultura cívica. A ello se suma nuestra “clase política”, que padece alta volatilidad electoral y mayormente carece de formación doctrinal.

Para Aristóteles el pueblo es asociación de familias. Entonces, gobernar bien no es un imposible, si se sabe “Gobernar para las familias” como titula una de sus obras el reconocido promotor social argentino, Ignacio Garda Ortiz.

            Ollanta dijo, en enero: “el arte de gobernar es también corregir”.

Por lo que si el presidente Humala corrige desvaríos, obtendrá legitimidad de ejercicio. Las prácticas de buen gobierno aconsejan que el Estado procure condiciones externas (el bien común), destinadas a asegurar a las familias la procreación, alimentación, educación, salud y seguridad, y que promocione el pleno empleo. El resto es ideología.

Publicado en el diario “La Razón”, Lima, jueves 17 de mayo de 2012, pág. 6

viernes, 11 de mayo de 2012

El fariseísmo de los DDHH


El fariseísmo de los DDHH

SERGIO TAPIA TAPIA

Director Jurídico de UnoAmérica







            El comunismo gobernó la mitad del mundo con crueldad deshumanizadora. Entre los genocidas históricos destacan: En Rusia Lenín y Stalin. En China, Mao. En Cuba, Fidel Castro y el Che Guevara. Pol Pot, en Camboya. En Viet-Nam, Ho Chi Minh. En Rumanía, Ceausescu. En Corea, Kim Il Sung. En Yugoeslavia, Tito. Desde 1917, durante 70 años, los gobiernos comunistas asesinaron más de 105 millones personas.

Pero, los marxistas para asesinar, lo hacen también con la guerrilla y el terrorismo. Hoy en Colombia las FARC perpetran crímenes, al igual que el ERP y Montoneros hace 40 años en Argentina. En el Perú fueron los guerrilleros de los sesenta; en los ochenta y noventa el MRTA de Polay y Serpa, y hasta nuestros días el Partido Comunista del Perú fundado por Abimael Guzmán (su nombre no es “Sendero Luminoso”). La lista incluye a los “republicanos” de la España de los treinta.

Como país victorioso de la Guerra Mundial, Rusia comunista tuvo impunidad, y sin legitimidad moral designó jueces para los tribunales post-guerra, cuyas sentencias son el origen remoto de la tergiversación actual de los DDHH. A partir de los ochenta los comunistas tomaron el control de organismos internacionales, subordinándolos a sus dictados ideológicos. Eso explica la sanción a los Estados por defenderse contra las guerrillas, así como la impunidad e indemnizaciones con las que cubren a los asesinos terroristas.

No abrigo esperanza que, el caso Chavín de Huantar, obtenga trato justo por estar sometido a una corte con sesgo ideológico.

Publicado en el diario “La Razón”, Lima, jueves 10 de mayo del 2012, pág. 6

jueves, 3 de mayo de 2012

Conga e ideología


Conga e ideología

SERGIO TAPIA TAPIA

Director Jurídico de UnoAmérica






La ideología impide ejercer la capacidad de conocer la verdad, obstruye la comprensión científica y dificulta vencer la ignorancia. La ideología es estrabismo intelectual y miopía de la inteligencia. Es prisma deformador de toda visión sobre lo real. Grandes males han causado las ideologías, desde que aparecieron hace tres siglos: la monarquía absolutista, el liberalismo y los socialismos (comunismo, fascismos, etc.).

Los ideologizados se imponen por su voluntarismo, y carecen de capacidad para rectificarse debido al fanatismo. Los treinta y dos años que el Perú sufre la agresión terrorista, demuestran lo que produce la motivación ideológica. Pero, no sólo el crimen terrorista es patrimonio de la ideología, hay otros daños que también causa.

Por motivos ideológicos se impide el proyecto minero Conga. Su postergación no fue discutida en un círculo de expertos, ni por una academia de científicos. Tampoco el Estado suspendió administrativamente la aprobación del EIA empresarial. Sin embargo, el desarrollo del proyecto Conga fue paralizado. Las causas han sido ideológicas, y los medios han sido revolucionarios, como la movilización de masas enardecidas de individuos despersonalizados que ignoran las razones que los convoca. Evitar la represión a esas masas ha sido prudente, porque los fallecidos y heridos son un preciado botín para el marxismo (“la violencia como partera de la historia”).

El presidente Humala agregó nuevas condiciones al proyecto; los empresarios están evaluando. Aún no se sabe si Conga va ó no va. Pero, no es conveniente para el bien común nacional que permanezcan latentes, las verdaderas causas del aplazamiento e indefinición de Conga. Es imprescindible que el grupo responsable del desenfreno revolucionario, sea derrotado política y culturalmente.

Diario “La Razón”, jueves 3 de mayo de 2012, pág. 6