28 de Julio de 2016
SERGIO TAPIA T.
La cónyuge de Ollanta
Humala (que encarna muchísimo más de la mitad de la naranja de la pareja
presidencial), se halla acorralada por pesquisas fiscales, denuncias políticas e
investigación de prensa, por diversas irregularidades y delitos. El salvataje a
la consorte presidencial, puede exponer a dar brincos inconstitucionales, de
peores consecuencias para este matrimonio empoderado.
Tres muertes enrarecen y
agravan aún más esa atmósfera, de quienes en vida han tenido estrecha
vinculación con la pareja presidencial: (1) El 22 de julio de 2015, fue asesinado
Emerson Fasabi, servidor del hogar privado presidencial, la información de prensa
lo vincula al caso de las agendas de la corrupción; (2) El 22 de enero del
2016, el militar Javier Briceño, se ahogó en el mar, según información de
quienes atendieron la emergencia, por aparente paro cardíaco; fue jefe de
inteligencia del presidente, defenestrado del cargo por el escándalo del
espionaje a políticos de oposición y de los propios que habían perdido la
confianza presidencial; (3) También en enero, el insólito homicidio del sobrino
del presidente, Daniel Seiffert, cuyo cadáver estuvo abandonado cinco semanas en
la Morgue; tiempo en que su familia se la pasó convencida de que se trataba secuestro
extorsivo, pero denunció policialmente como desaparición; ha habido una extraña
e impune inoperancia policial.
Es preocupante que los
candidatos duden y censuren la idoneidad del JNE, ente conductor del proceso y administrador
de la justicia electoral. Porque debilita gravemente estas elecciones. Y, precisamente,
cuando tenemos un presidente “chavista”,
adscrito al modelo político de las izquierdas marxistas latinoamericanas, que cínicamente
se inclinan a perpetuarse en el poder que alguna vez logran electoralmente.
¿Ollanta Humala respetará
que su ciclo gobernante concluye este 28 de Julio?
Es indescartable un golpe
que favorezca la salida de la pareja presidencial al exterior, y que cuente con
apoyo de algunos candidatos, porque en el Perú los demócratas son golpistas.
Recordar a Bustamante y Rivero, quien en 1931 redactó el manifiesto justificando
el golpe de Sánchez Cerro contra Leguía, y fue Ministro de Justicia de la Junta
Militar; y Fernando Belaunde Terry logró ser presidente en 1963, por el golpe militar
contra la elección presidencial de Haya de la Torre de 1962.
Para Estanislao Cantero, en
Latinoamérica, los golpes suelen ser crisis en democracia, porque sirven para
renovar el sistema y relanzarlo. Aunque la Constitución los condene severamente.
Dentro de 4 meses podría
ser que no tengamos sucesión presidencial ni de congresistas, oportunamente electos.
Por ilegitimidad del actual proceso electoral, que se torna estéril por sus
vicios e imperfecciones, y la maquinación de algunos candidatos demócratas.
Si esto ocurriera, nuestro
Derecho Constitucional no ha previsto soluciones, siendo el único Poder del
Estado con presidente por elección el del Poder Judicial: ¿Será Ticona el presidente
de la República de emergencia?
Publicado en el diario “La Razón”, Lima, viernes 25 de marzo de 2016,
pág. 6
Blog (colección artículos publicados en La Razón): http://sergiotapiatapia.blogspot.com/
