viernes, 22 de septiembre de 2017

La deformación izquierdista del terrorismo en el Perú - artículo

La deformación izquierdista del terrorismo en el Perú
Sergio Tapia

            A las izquierdas marxistas les cuesta muchísimo condenar las acciones terroristas del Partido Comunista del Perú (mal llamado “Sendero Luminoso”) y las del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA). Razón por la que, desde el inicio de las acciones delictivas el 17 de mayo de 1980, hasta hoy, las izquierdas se niegan a responsabilizar criminalmente a sus conmilitones comunistas. Tal como lo testimonia el Informe de la presuntuosamente denominada “Comisión de la Verdad” y lo reconfirman los ONGs gramscistas dedicadas febrilmente al lobbing judicial aquí, como en Colombia.

            Nos han cambiado la historia vivida en los 80 y 90. Ya no se registran en nuestra Historia Nacional los acontecimientos vividos conscientemente por los peruanos que hoy cifran los 43 años o más, ni lo sufrido por los mayores de 26 años que se mantuvieron en vilo 127 días de secuestro en la residencia del embajador japonés.

La inmensa mayoría de ciudadanos vivieron parte de su vida inmersos en las acciones delictivas perpetradas por los comunistas. Sin embargo, se cambió la historia, se modificó el libreto, se trastrocó la visión de las cosas, se alteró la explicación de las causas y consecuencias.

En esta embustera manera de subvertir la Historia, porque ya no importan los hechos sino la ideología interpretativa, se culpa a las miembros de las FFAA de haber generado violencia deshumanizadora, crímenes inimaginables y toda suerte de atropellos contra población civil indefensa e inocente, contra los pobres, contra las minorías etnolingüísticas del ande y contra determinados “luchadores sociales”.

¡Qué maniobra! Un psicosocial de envergadura. Que ha requerido cabezas para un estado mayor pensante (estrategas políticos), elementos de maniobra subordinados (medios de prensa y partidos políticos), numerosos activistas (guionistas, redactores, comentaristas, conductores de programas, testigos falsos y acusadores noveles).

Hay prueba incontrovertible de toda esta gran operación. El Informe Final de la Comisión de la Verdad y Reconciliación, impuesto en sede judicial como documento cabeza de proceso en los juicios contra los militares por haber luchado contra el terrorismo. El LUM (Lugar de la Memoria, la Tolerancia y la Inclusión Social), del que aún no se adivina todo su plan operacional; que ha sido financiado por el Estado Alemán. La izquierda promovió las donaciones, y las agradece con suma aceptación. Sin odio ni rencores contra ese Estado alemán que eliminó a todos los miembros de la primera generación de la banda terrorista comunista Baaden-Meinhoff: uno por inanición en 1974 antes de ser sentenciados, la Meinhoff por estrangulamiento en 1976 durante el proceso judicial, y Baaden con los tres restantes por suicidio colectivo en 1977. Todos los hechos sucedidos en la prisión de Stammheim, construida especialmente para alojar a tan peligrosa banda de terroristas. Así es la izquierda, suele perder la razón y la memoria ante los euros contantes y sonantes.

Pero, para los peruanos es inconcebible que, con dinero alemán, proveniente de esa misma sociedad que sufrió el terrorismo mortal y desalmado, en los años 70. Hoy se financie en el Perú la elaboración y difusión de una pseudo-historia, para culpar a los miembros de la Marina de Guerra del Perú de haber perpetrado un supuesto crimen, en El Frontón, que aún no ha sido juzgado: ¿Dónde quedaron los derechos humanos sobre la presunción de la inocencia? ¿Y, el respeto entre Estados soberanos sobre la no injerencia en asuntos internos?

Pero, llama mucho la atención, que el Canal 7 de TV del Estado, transmita en la serie Sucedió en el Perú, un visión sobre El Terrorismo en El Perú, que es la suma de todas estas tergiversaciones anotadas. Estas carencias en nuestra identidad, son la debilidad de nuestra Nación.

Publicado en el diario “La Razón”, Lima, viernes 22 de setiembre de 2017, p. 6

Blog (colección artículos publicados en La Razón): http://sergiotapiatapia.blogspot.com/

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